Milagro

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Para otros usos de este término, véase Milagro (desambiguación).

Según muchas religiones un milagro es una intervención de Dios en el Universo.

Hay que tener en cuenta que dependiendo de la religión que se trate (cristianismo, Islam...) existen definiciones diferentes de la palabra "milagro". Aun dentro de una religión usan esta palabra en más de un sentido. A veces 'milagro' está usado para indicar un hecho de algo sobrenatural que no es un Dios.

Desde el fondo de la historia humana, la falta de sentido común en algunos hace que cualquier hecho de carácter extraño que para los que lo tienen tiene un significado muy simple, para esa gente sea algo a lo cual se le pueda referir como un milagro, una señal de que el final está cerca o que Dios, la Virgen, etc., están buscando maneras de comunicarse con nosotros en la tierra. Ejemplos de estos casos se escuchan a diario en las noticias: la aparición de una sombra con forma extraña en una pared, el famoso sandwich con la imagen de la Virgen, etc.

[editar] Catolicismo Romano Apostólico

Para que la religión católica considere un hecho milagroso, este no debe tener una explicación científica. Cuando se le atribuye un milagro a una persona difunta, ésta puede llegar a ser beatificada y luego canonizada por el Vaticano.

Un milagro es en sí un hecho sobrenatural en el cual se manifiesta el amor de Dios hacia los humanos y su presencia diaria entre nosotros, pero la única verdad es que la Fe no necesita de milagros. Según la religión católica, el que cree no necesita ver.

[editar] El milagro según Un Curso de Milagros

Según Un Curso de Milagros (UCDM), el Milagro es una corrección en la "mente errada" que modifica la percepción del mundo del ego (de pecado, culpa y miedo), por medio del perdón del Espíritu Santo. Por esta razón, los milagros son expresiones naturales de perdón que cancelan el pasado en el presente, y así, liberan el futuro. A diferencia de las proyecciones del Ego que fabrican errores ilusorios, el milagro elimina el error porque el Espíritu Santo lo identifica como falso o irreal. Esto es lo mismo que decir que al percibirse la luz, la oscuridad desaparece automáticamente. Los milagros son ejemplos de recto pensar que armonizan las percepciones con la verdad tal como Dios la creó. Uno de los mayores beneficios que se deriva de los milagros es su poder para liberar de la separatividad, es decir, del falso sentido de aislamiento, privación y carencia que siente el individuo que se identifica con el Ego.

Los milagros ocurren naturalmente como expresiones de amor. El verdadero milagro es el amor que los inspira. En este sentido todo lo que procede del amor es un milagro. (Un Curso de Milagros, Texto, pág. 1)

El milagro, según Un Curso de Milagros, no debe confundirse con el concepto tradicional de milagro como cambio espectacular en los fenómenos externos percibidos por los sentidos, debido a la suspensión temporal de las leyes de la naturaleza.