Traumatocrinus
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Los crinoideos sufrieron una importante extinción a finales del periodo pérmico, hace alrededor de 245 millones de años. En el triásico apenas si quedaban unos cuantos representantes, el Traumatocrinus fue uno de ellos.
Eran animales marinos que vivían fijos en el substrato. Se alimentaban de microorganismos y partículas orgánicas arrastradas por las corrientes, a los que atrapaban gracias a las finas extensiones de sus largos brazos.
Existen muy pocos representantes actualmente pero los lirios del mar son un ejemplo.