Trieste

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Trieste

País:	Italia
Región:	Friuli-Venecia Julia
Provincia:	Trieste
Coordenadas:	Latitud: 45° 38′ 10′′ N Longitud: 13° 48′ 15′′ E
Altitud:	2 msnm
Superficie:	84,49 km²
Población:	207.069 31-12-04
Densidad:	2.479,80 hab./km²
Fracciones:	Barcola, Villa Opicina, Miramare, Grignano, Basovizza, Banne, Cattinara, Conconello, Contovello, Gropada, Longera, Padriciano, Prosecco, Santa Croce, Trebiciano, Servola
Municipios limítrofes:	Duino-Aurisina, Monrupino, Muggia, San Dorligo della Valle, Sesana (Sežana) (SLO), Sgonico
Código postal:	34100
Prefijo tel.:	040
Código ISTAT:	032006
Código catastral:	L424
Gentilicio:	triestini
Santo patrón:	San Justo
Día festivo:	3 de noviembre

Página web oficial

Piazza Unità d'Italia, Trieste

Trieste es una ciudad situada en el norte de Italia, a orillas del Mar Adriático y casi en la frontera con Eslovenia. Cuenta con 209.520 habitantes y disfruta de un clima suave y soleado. Es la capital de la provincia del mismo nombre, en la región llamada Friuli-Venezia Giulia. Se piensa que fue fundada por los romanos en el siglo II a. C. con el nombre de Tergeste (terg es un término céltico que significa mercado). Ha mantenido siempre lazos con la cultura italiana, pese a haber estado bajo poder de la Austria de los Habsburgo desde 1382 hasta la caída del Imperio Austrohúngaro tras la Primera Guerra Mundial, del que era su principal puerto marítimo. En la actualidad, junto a una población mayoritariamente italiana, destaca la presencia de eslovenos, y en menor medida de croatas, albaneses, alemanes, griegos y chinos.

[editar] Trieste en la literatura

A esta ciudad, enclavada en el punto más al norte del Mar Mediterráneo, lugar convertido en 1719 por voluntad del emperador austríaco Carlos VI en la vía adriática de las mercancías alemanas en tránsito hacia el Imperio, se deben una serie de atributos contradictorios, el de ser punto de coexistencia de italianos y austríacos, urbe latina y campo eslavo, sitio de riqueza a unos cuantos kilómetros de la tierra más pobre. También es el punto en que el cielo triestino comparte el viento denominado bora glacial del NE con el febril siroco que sopla desde el sur. Estadísticamente, Trieste no cuenta más viento que todas las otras ciudades mediterráneas, pero durante el invierno la Bora a veces puede soplar bastante fuerte en la costa adriática.

En 1912 Rilke buscando el lugar propicio para su inspiración, después de recorrer los lugares de mejor clima y mayor belleza en Europa, se convirtió en huésped de la princesa de la Tour y Taxis, en el castillo de Duino en Trieste y en 1912 le escribió a la princesa Katerina Kippenberg diciéndole «es como si el viejo castillo escarpado estuviera de nuevo en manos de los austriacos un día, en otro de los italianos» y esta sucesión de contrastes fue captada por Stendhal, que describió la bora y el siroco en estos términos: «sopla la bora dos veces por semana y el gran viento (sirocco) cinco veces. Lo llamo gran viento cuando uno está constantemente ocupado en sujetarse el sombrero, y bora cuando uno teme romperse un brazo. El otro día fui arrastrado cuatro pasos por el viento. Y el año pasado, un hombre prudente, que se encontraba al borde de esta ciudad tan pequeña, pernoctó en un albergue por no atreverse a volver a su casa por miedo a la bora. Yo podría burlarme de este viento con la misma valentía que mostré contra los ladrones en Cataluña, pero ocurre señor, que me produce reumatismo en las entrañas...»

En la actualidad, Claudio Magris (nacido en Trieste) es uno de los referentes de la literatura italiana contemporánea. Una de sus obras más emblemáticas, "Microcosmos", repasa los lugares que, según el autor, mejor definen el espíritu de esta ciudad de tradiciones tan diversas.