Arnor
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Arnor, también conocido como Reino del Norte, es, dentro del mundo de ficción de El Señor de los Anillos, de J.R.R. Tolkien, un reino que se extiende al oeste de Eriador, en la Tierra Media. Limita al norte con el Reino de Angmar y la Bahía de hielo de Forochel, al oeste con las Montañas Azules, al este con las Montañas Nubladas y al sur con el río Gwathló.
Este reino fue uno de los dos reinos que los Dúnedain fundaron en Eriador tras la caída de Númenor. La capital del reino era Annúminas, donde se encontraba la piedra de Annúminas, una de las piedras palantir y el Anillo de Barahir, símbolo del linaje de los reyes de Arnor. Otras ciudades importantes eran Fornost y Tharbad.
Como consecuencia de divisiones entre hermanos por la sucesión a la corona, el reino se dividió en tres: Arthedain, Cardolan y Rhudaur. Estos tres reinos fueron desolados por las tropas de Angmar, cuyo rey era el Rey Brujo, señor de los Nazgul.
Tras la Guerra del Anillo y la coronación de Aragorn como rey del Reino Unificado, el reino empezó su reconstrucción.
